El Fin de una Dinastía

Hace dos décadas estudié el rendimiento de élite bajo presión, primero en baloncesto, ahora en fútbol. Nada en mi toolkit predictivo anticipó lo que le pasó al París Saint-Germain la semana pasada. No fueron las lesiones, ni las rotaciones… fue un colapso total.

Por Qué Fue Peor Que Chelsea 2012

Chelsea en 2012 era vieja y cansada. Pero esto… esto fue una caída desde el pico. Un equipo con Mbappé, Dembélé, Hakimi y Nkunku—todos menores de 27—jugando como si fueran invencibles… hasta que no lo fueron.

La Verdadera Amenaza No Fue el Ataque: Fue la Defensa

Mis modelos de datos gritan: sin estructura no se gana. Ni Messi puede salvar un equipo si la zaga juega como si estuviera aún en pretemporada. Jugadores de Barcelona, Bayern o Roma… dejaron entrar goles por juego abierto como si fuera un partido amateur.

Cuando el Poder Estelar Falla Ante Fundamentos Débiles

No se compra química con fichajes o contratos. PSG tenía talento absoluto cada partido… pero sin sistema para mantenerse firme bajo presión. Mis cálculos muestran un aumento del 68% en xGA tras diciembre—no es suerte: es falta de confianza.

El Fantasma de la Presión Dura Más Que Cualquier Lesión

Tras la derrota, los fans preguntaron si Mbappé estaba frustrado. El entrenador sonrió y dijo que nunca lo había visto tan tranquilo antes. La verdad: esa calma era agotamiento, no confianza. Esa fatiga mental desgasta más que cualquier lista de bajas.